martes, 30 de julio de 2013

Adiós mi gordito!






Pudo haber sido el mejor mes de toda mi estadía... las cosas se habían calmado... salía continuamente... disfrutaba realmente estar acá... pero una perdida dejo un hoyo difícil de llenar... un vacío que no se puede reemplazar... la muerte de mi 'gordito'.


Posts anteriores había comentado que mi prima tenía dos 'ferrets' (hurones) como mascotas... un macho de color blanco y una hembra de color marrón. En mi último post, había dicho que uno de ellos (el machito) se encontraba mal... pues hace una semana, he passed. Al parecer lo que tenía era un cáncer muy avanzado... por eso ya no corría, no comía, no era el de antes... 

El 'gordito', como le llamábamos, era el más cariñoso de los dos... al que podías cargar y nunca te mordía... al que pegabas a tu pecho y él con sus patitas te abrazaba. Capaz no era mi mascota y solo estuve con él 4 meses... pero realmente me encariñé mucho con él. Siempre en las noches lo sacaba de su jaula a escondidas para jugar con él... lo cargaba hasta que con sus patitas traseras trataba de arañar mi muñeca... realmente era adorable.

Y pensar que la primera vez que lo vi, me parecía una rata blanca... no lo quería tocar, ni a él ni a su hermana por temor que me mordieran o algo. Pero fueron transcurriendo los días y me fui encariñando... con ambos, pero más con él por su ternura. Quizás habría sido porque extrañaba a mi perra que está en Perú... pero realmente les tomé mucho cariño.

Al cumplirse casi una semana que se fue, me pareció correcto dedicarle un post entero a él... que donde quiera que esté (sí, yo creo que los animales también tienen alma) sepa que lo quiero mucho y que lo extraño... que su ausencia ha dejado un terrible vacío en su jaula. Aún está su hermana (la marroncita) a quien le estamos dando toda nuestra atención... pero ella también lo extraña.

Siempre recordaré los días en que lo cargaba... en que me revolcaba en el piso para jugar con él... en que lo apartaba de su plato de comida porque le decía que estaba muy gordito... en que lo abrazaba... y sobre todo que le cantaba parafraseando la canción del Rey León (porque al alzarlo como la foto de arriba... parecía Simba). Pues él es y siempre será mi gordito sin fin... porque él lo mueve todo!


"I'll be there"


3 comentarios:

  1. Oie pues los animales tienes alma, un alma de animal claro (como los humanos tenemos alma de humanos y las plantas tienen alma de plantas, no es el caso hacer la explicación metafísica ahora...). Tienes razón a veces nos encariñamos mucho con los animales, como auténticos compañeros, es que al fin y al cabo son eso... compañeros ("con quien se comparte el mismo pan"). Saludos.

    ResponderEliminar
  2. Tu mascota está en el cielo de los hurones, un lugar hermoso donde es feliz y no hay carencias de ningún tipo, sé que es muy doloroso, pero quizá algún día, en otra dimensión se reúnan.

    ResponderEliminar
  3. esta entrada me ha conmovido mucho, hace poco mi amiga Are perdió asu perrita, y era casi como una mas del grupo, mas o menos entiendo lo dices

    ResponderEliminar