Dicen que una imagen vale más que mil palabras...
y ésta, sin duda, refleja lo que hay hoy en mi alma.
No, no es que me encuentre llorando...
tampoco, rezando...
sólo estoy recordando.
¿Qué recuerdo?
o más bien dicho,
¿a quién recuerdo?
Recuerdo a aquel muchacho que movió mi mundo una vez...
y ya hace mucho tiempo, no lo he vuelto a ver.
No sé hace cuánto no lo veo...
hace mucho que deje de contar eso.
Ya no vivo buscando un tal vez, un quizás...
me encuentro bien sin saber de él, en verdad.
Entonces, ¿Por qué la imagen?
Es que los dioses volvieron a jugar...
con toda su frialdad...
a los dados, una vez más...
mandándome a rodar.
Me estoy ahogando en un vaso de agua...
pues aún no pasa nada...
un día no es suficiente para deslumbrar...
como una noche de pasión, no es suficiente para amar.
No quiero hablar de lo que me pasa...
ha sido un mes muy bueno personalmente...
y no me he sentido triste o solo como antes...
entonces, ¿qué me pasa?
es solo que...
que...
no me quiero ilusionar!!!
Y no, no se trata de él...
se trata de otra persona...
pero no entiendo por qué...
lo traigo a colación?