viernes, 24 de enero de 2014

Mi reencuentro con Daniel!




El domingo pasado me encontré a Daniel... ¿dónde? No importa, solo diré que me encontré con él. Daniel, el chico por el cual yo estuve muy ilusionado desde los comienzos de este blog... el mismo que yo consideraba como el chico perfecto (tanto por su físico como personalidad) y pensaba que jamás podría olvidar... pero, a la par, de quien me decepcioné al darme cuenta que dicho chico no existía y solo era producto de mi imaginación... pues bien, a ese mismo chico volví a ver.

Había pasado como dos años de la última vez que nos vimos... estaba más llenito, culpa de la comida chatarra según me dijo... aunque no era por eso el por que me había dejado de parecer tan lindo. Me acerqué a saludarlo, total no habíamos terminado en malos términos... nos sentamos, entonces, uno al costado del otro... hablando qué fue de nuestras respectivas vidas, aunque más de la mía ya que él no gusta hablar mucho de la suya... llegando así contarle lo sucedido con L... sin darle mucho detalles.

Estar ahí con él me hizo sentir bien... aunque él, mañoso como siempre, empezó a poner su mano sobre mi pierna... para pasar a tomar mi mano y entrelazar sus dedos con los míos. Yo, la verdad, no me nacía hacer nada en ese momento... pero tenerlo tan cerca a mi disposición, nació que quisiera robarle un beso... así que sin que él me de permiso, puse mi brazo izquierdo sobre sus hombros y tomándolo de la barbilla con mi mano derecha, lo acerqué hacia mí... posando mis labios sobre los suyos... para plantarle el beso que no le di la última vez.

No puedo decir que sentí algo con ello... él me respondió el beso sí, pero ya no producía en mí esas sensaciones que alguna vez produjo... más lo comparaba con los besos de L jeje... pero empezó a darme 'picos' (besos de labios) y recordé porque me había gustado... luego pasó a hacer lo mismo en mi cuello... debo decir que el cuello no es un punto débil en mí, es más, ni siento nada cuando lo hacen... pero él siempre ha sabido deleitarme en esa parte... quizás porque lo hacía con ternura más que con pasión.

Paramos y continuamos hablando... me pidió mi número y me 'timbró' (llamó para que sonará mi telefono y colgó) para que yo guardara el suyo. Me dijo que le escriba para quedar un día para salir... y quien sabe, concluir lo que no se concluyó la otra vez. No sé por cuanto tiempo estuvimos ahí, pero él ya se tenía que ir... así que se fue y después yo me fui. Me dio mucho gusto verlo, aunque no logró sacar a L de mi cabeza ni por un momento... es que las cosas con él al final no se dieron, pero no terminamos mal... no como con L, que después de lo que he hecho seguro no quiere verme.

Me gustaría salir con Daniel y ser 'patas' (amigos)... de esos con los que se puede salir a 'hacer hora' (pasar el rato)... total, ya no siento nada por él, así que no me importa con quien se acueste (y me ha contado con quienes se ha acostado)... pero conociéndolo como lo conozco, dudo mucho que esto llegue a pasar. Daniel es bien difícil de ubicar a veces... pero no pierdo nada con intentar... en buen plan. Y con respecto a lo otro (sexo) no sé si llegue a dar... es que él ya no me excita como quizás alguna vez lo hizo... pero quien sabe, primero habría que ver si está dispuesto a salir... o si las cosas quedaron solo allí!

jueves, 16 de enero de 2014

Cuadro depresivo (Volviéndome loco)!




Nunca pensé que llegaría a tal punto...

Antes de mi retorno a mi país (de Estados Unidos), mis padres se enteraron que era gay... esto no fue solo difícil para ellos sino también para mí. Nunca fui de los que pensaba que era necesario contárselo a sus 'viejos' (padres) ni nunca creí que estaría en una situación así... mi madre lo tomó de la mejor manera posible, me dijo que me amaba y me apoyaría... pero mi padre lo tomó fatal. Según sus palabras, esto era una enfermedad y si yo quería su ayuda me acompañaría a "tratar"... que me vería diferente y no recibiría su apoyo. Yo no podía estar cerca a mi 'viejo' (padre), no me hablaba ni saludaba ni miraba... es por ello que todas las noches salía a cualquier sitio con tal de no verlo... y fue en una de esas salidas que voy a aquel bar y conozco a L.

L revivió en mí una ilusión ya antes perdida... desde Daniel, pensé que nunca volvería a sentir eso que es tan parecido al "amor"... y pese a haber salido con chicos anteriormente, nadie había logrado conquistarme. No puedo decir que me enamoré, pero sí me ilusioné y mucho... sobre todo porque él dio pie a que creciera dicha ilusión (léase "L, un pedazo de mi corazón"), mas las cosas no se dieron y al final nos distanciamos... cayendo yo en una profunda depresión. Por otra parte, las cosas en casa mejoraron... la relación con mi madre se profundizo tanto... al punto de poder contarle las cosas que me sucedían (las cosas con L)... y mi padre finalmente habló... luego de lanzarme toda su ola de odio y resentimiento, dijo que me aceptaría porque yo era su hijo, mas seguía pensando que esto tenía cura.

Todas estas cosas ocurrieron entre Septiembre y Octubre del año pasado... Noviembre fue un mes terrible para mí... como dije, me hundí en una depresión, me cuestionaba muchas cosas, sentía ira por otras (sobre todo entender que él no era quien yo creí que era)... pero lo más triste es que me volví 'stalker' (acosador). Sin necesidad ir muy lejos, encontré información sobre L... desde su fecha de nacimiento hasta su documento de identidad... y fue así que comenzó mi locura. Un día, ante la rabia que sentía, le envié un mensaje de internet con su número de identidad para asustarlo... me arrepentí, pero más fue la torpeza de llamarle y ver que su celular estaba apagado... para después recibir una llamada perdida de su parte.

Me asusté, él no era tonto, sabría que yo fui quien le envió el mensaje... ante la desesperación agarré mi 'celular' (móvil) lo arrojé contra el piso... cogí el chip y lo hice 'añicos' (destroce). Recuerdo que tomé un carro que iba a su universidad... mas me baje antes de llegar a dicho lugar... sino fuera por mi madre y el apoyo mi familia (aunque ellos no sabían nada) que pude salir de ese momento de desesperación, aunque la tristeza no se iba. Luego de recuperar mi número, le envié un mensaje saludando... mas no recibí respuesta alguna hasta dos semanas después, justo cuando había decidido olvidarlo. Me llené de ira y de vuelta rompí el chip... con la diferencia que esta vez di de baja al número.

Lloré, lloré como nunca lo había hecho antes... y es que en todo este tiempo no había botado ni una lágrima... pero ahí estuvo mi madre y mi hermana para levantarme de esa situación. Obtuve un nuevo número... Diciembre llegó y me matriculé a clases de inglés por las noches... mas el deseo de verlo no se habían ido. Saliendo de clases, iba hasta los alrededores de su casa con la esperanza de tan solo verlo llegar de lejos... pero nunca se dio la oportunidad. Tanto fue así, que empecé a olvidarme del asunto... deje de ir y preocuparme más por los eventos navideños que tenía. Llegó la fecha de su cumpleaños y no sentí la necesidad de llamarlo... hasta dos días después, pero su manera de responderme, su tono de voz, no era la misma (supuse que aún recordaba lo del mensaje).

Empecé a sentirme mejor, o eso creía yo... la Navidad fue muy bonita... pero después de eso, volvió un poco la depresión. Las fechas en Diciembre son las mismas que en Septiembre (mes que lo conocí), es por ello que vuelvo a ir a su casa y esta vez sí logro verlo. Ahí estaba él, tan radiante, tan calmado... me sentí mal porque se le notaba que estaba bien, mientras yo no lo estaba. Lo seguí, según yo, sin que me viera... pero le perdí el rastro. Un día después, recibo un mensaje suyo enviado de internet, preguntándome si tenía id de Line para estar en contacto... me asusté y entré en una crisis nerviosa terrible que me llevó a estar en cama todo el día... pero luego, ya más calmado, le doy mi id.

Llegamos a hablar vagamente el 31... yo me iba a la playa a pasar año nuevo con unos amigos... él, pues no le pregunté. Para estas fechas había logrado entrar a trabajar a un call center de una compañía telefónica... compañía a la que él pertenecía y gracias a ella, logré obtener más información sobre su número telefónico... como enterarme que tiene otro número. Pero lo que me 'psicoseo' fue la idea que me dio un amigo acerca de bloquear su número... allí empezó nuevamente mi 'bajón'. Nuevamente volví a los alrededores de su casa, pero esta vez lo vi salir y luego lo vi caminar con un chico. Yo no sé quién era, podía ser solamente su amigo... pero dos amigos no caminan tan lento o sí? Lo que es peor, lo seguí cuando volvía a su casa... y luego recibo un mensaje por Line preguntando si era yo.

L me había visto la vez anterior, por eso preguntó por mi id... el muy imbécil en vez de ser directo y preguntar qué hacía por su casa, prefirió hacerse el que quería saber de mí... y esto provocó una reacción de ira en mi interior. El deseo de vengarme con junto al hecho de pensar que este chico pueda ser su nueva conquista... me condujo a una desesperación terrible... al punto de empezar a golpearme... a sentirme devastado... frustrado... y desear acabar con mi vida. Nunca antes había estado en esta situación... de estar 'stalkeando' o desesperándome, es por ello que pedí ayuda... hablé con una prima que anteriormente ya me había ofrecido la ayuda de ir con un psicoterapeuta... fuimos y me han diagnosticado que me encuentro en un cuadro depresivo... me ha derivado también al psiquiatra y me ha asegurado que con junto a las terapias que voy a recibir saldré de esto.

Nunca creí que algo así me llevaría a tal punto... deje el trabajo porque estar allí pudiendo ver su información en las computadoras me hacían daño... no estoy estudiando este mes porque no puedo concentrarme en los estudios. Lo que yo tengo no es normal y por eso he pedido ayuda... los pensamientos de atentar contra mi vida están ahí, pero soy bien cobarde para hacerlo... que el día que coja valor, sé que lo haré. No escribo esto con ganas de fomentar pena o algo... es que hacía mucho que no escribía... no tenía la motivación de hacerlo hasta ahora... aún hay bastante rencor en mi alma y sobre todo me encuentro en un grado de inferioridad único. Yo no sé por qué me he obsesionado tanto con L... fue un error ir a su casa, totalmente un error... pero a la par tengo vergüenza de lo que he hecho... tengo muchos sentimientos encontrados, pero quiero salir de esto... quiero volver a ser yo y olvidar que una vez L existió!