martes, 25 de diciembre de 2012

¿Espiritu Navideño?

 
 
 
La mañana amaneció como cualquier otra... con la diferencia que realmente era mañana y no tarde como suelo levantarme. Eran las 6:30 de la mañana del 24 de Diciembre del presente año... motivo de mi despertar tan presuroso: tener que ir a trabajar temprano. Debía entrar a las 7, pero yo, tarde como siempre, llegué a las 8... mi jefe no dijo nada.
 
El día comenzó tenso... la gente entraba y salía... algunos te deseaban una feliz navidad, otros ni las gracias te daban. Los problemas personales de uno de los trabajadores ocasionó que las cosas fueran empeorando... sin mencionar que en el local trabajaban también su hermana y enamorada. Todo se sentía ajustado, quería salir corriendo del lugar... salir y no regresar.
 
Luego de mi hora de comer, las cosas continuaban igual... pero traté que esto cambiase. La tarde le continuó un poco lenta y por momentos rápida... conversas por aquí y por allá, la volvían amena... y hacía olvidar que era noche buena. Salimos una hora antes de lo acostumbrado... luego de desearle una feliz navidad al jefe y compañeros, me dirijí a mi recinto para prepararme para la noche*.
 
Era la primera navidad que pasaríamos en la casa nueva... salvo mi hermano quien en otro país se encuentra. Pensé que la pasaría triste o amargo, ya que así me encontraba los días previas a la noche buena... pero algo pasó esa mañana para que mi estado de ánimo cambiara. La cosa es que algo en mí cambió... y eso ayudo a que disfrutara la noche con emoción.
 

Capaz no habrá sido el mejor día laborando...
quizás tampoco haya comprado los más exquisitos y costosos regalos...
pero estar en armonía con mi familia, por primera vez en días... 
viendo los fuegos artificiales desde la terraza, es lo que realmente cuenta! 
 
 
Luego de pasada la medianoche, nos dirigimos a la casa de mi abuela a reunirnos con la demás familia para cenar (aquí se cena después de la 12)... aunque había comenzado a lloviznar, eso no impidió que llegaramos a saludar a los demás. No soy de comer pavo, usualmente como pizza para estas fechas... pero la pasé bien con ellos viendo los videos del 'pollito pio'.
 
Volvimos temprano a casa, pues estabamos cansados... pero entrar un 'toque' (momento) a internet, no es lo mío... pues me quedé hasta las 6 de la mañana en linea. Me levanté al promediar las 3 de la tarde, hora que bajé a almorzar y esperar la llegada de mi familia por parte de mi madre, quienes se reunirían para hacer el intercambio de regalo (el juego del amigo secreto).
 
Más tarde me reuní con mi amigo Rogger con quien estuve 'dando vueltas' (paseando) por el centro para después dirigirnos al cine donde trabajé y terminar comiendo en el KFC. Y así terminé estas fiestas navideñas... quizás no fueron las mejores, pero tampoco las peores. Lo importante es pasarla con personas que uno quiere y que le quieren.
 
 
*Aquí en Perú, celebramos la navidad del 24 para el 25 en la noche...
cuando el reloj dan las 12, todo el mundo se saluda...
el cielo se ilumina por los distintos fuegos artificiales que lanzan la gente alrededor...
y luego de abrir los regalos (que usualmente solo los niños reciben), toda la familia se junta en la mesa para comer...
el pavo, el panetón y el chocolate caliente... aunque sea verano!
 
 
 Un video que muestra como se ve el cielo de Lima, Perú a la medianoche del 25
ojo: el video NO es mío
 
 

 

jueves, 20 de diciembre de 2012

Trabajo duro!

Hacía 5 años que no volvía a pisar ese almacen... aquel almacen que fue parte de mi joven vida, 5 años atrás. Estaba diferente, me sentía diferente, yo era diferente... ya no era aquel niño de 16 años que entró aquella vez... inocente, testaduro, ingenuo... que hacía las cosas pero no quería aprenderlas. Hoy, era un joven quien entraba a ese lugar... dispuesto a aprender y verdaderamente a trabajar.
Estoy hablando del trabajo donde me encuentro actualmente... que no es nuevo, sino que fue el primer trabajo que tuve. Me lo consiguió mi hermano por medio de una amiga suya... quien se convertiría en una gran amiga mía los 9 meses que duré trabajando en dicho lugar. Era una tienda de golosinas al por mayor... y mi trabajo consistía en atender al público y el almacen.
Hoy, esto no ha cambiado... el trabajo sigue siendo el mismo, pero yo no soy el mismo. En aquel entonces trabajaba por rebeldía, pues no quería estudiar... esta vez trabajo por necesidad. No, no es que me estoy muriendo de hambre ni nada de eso... sino que estoy juntando dinero para un viaje que planeo hacer el próximo año.
Aquel entonces trabajaba 5 horas (medio tiempo), hoy trabajo 8 (tiempo completo) en las tardes. Es más que todo por campaña navideña, ya que en estas fechas... el que menos compra golosinas para las distintas actividades navideñas como las famosas 'chocolatadas' que aquí en Perú. Al comienzo me eran extenuante, pues sentía las horas pasar lentamente... ahora ya me habitué y la hora pasa normal... incluso rápido cuando hay bastante gente por atender.
Los dueños de dicho local son una pareja de esposos con 2 hijos menores... me ha sorprendido el cambio de carácter que han tenido en estos años: ya no es aquel jefe que se irritaba facilmente cuando no entendías lo que te pedía... ya no es aquella jefa que sin soltar ninguna lisura, te decía tu vida entera. No digo que hayan sido malos, sino que ahora son más tolerantes que antes... quizás por el mismo pasar de los años.
No puedo decir que me gusta plenamente trabajar allí, pues no es lo que quiero para mi vida... pero me siento agusto por el momento, total es solo este mes y quizás el próximo, aún no lo sé. Hay días buenos y otros malos... días cansados y otros más relajados... pero algo que sí he notado es que ahora atiendo con más amabilidad que antes. Digo, antes atendía desganado... y ahora, aunque este cansado o fastidiado, siempre muestro una sonrisa.
Lo malo es que me quita practicamente todo el día, ya que entro en la tarde y no salgo hasta promediar las 10 de la noche... es extenuante, pero ya me he acostumbrado. No pensé volver a trabajar en dicho lugar... pero es una experiencia más. Qué feo es trabajar por una necesidad, pero lo bueno es que la recompensa vendrá al final... o no?

jueves, 13 de diciembre de 2012

Herido, frustrado, fastidiado... pero ¿vencido?




Quisiera escribir muchas cosas... podría contar otras... pero la verdad es que no hay mucho de ninguna. Las cosas han cambiado... he dejado de estudiar, cosa que quizás continúe más adelante, y me he puesto a trabajar para juntar dinero y así realizar un viaje que planeo hacer... pero que esta vez, no será de placer.

Mi familia se ha mudado a un nuevo hogar... un departamento de 3 pisos que todos los que lo han visto, han quedado fascinados con él... pero yo no me siento a gusto allí. Quizás sea por la rencilla que tuve con mi padre antes de mudarnos, la razón por la cual no quiero estar allá. Me encuentro resentido por las palabras que me dijo...

No entiende que tener una casa propia (en este caso un departamento) siempre fue su sueño, mas no el mío. Mi sueño, cuando chico, siempre fue que al llegar a mi juventud, yo debería vivir independiente de mis padres... ejerciendo una profesión, manejando un carro y viviendo la vida que todo joven quisiera tener. 

El resentimiento hace que no disfrute de la nueva casa... porque no quiero estar allí, no quiero verlo (a mi padre)... de hecho, casi nunca lo veo pues él sale a trabajar muy temprano y yo llego de trabajar muy tarde  cuando ya está durmiendo. Pero no quiero que este resentimiento afecte a personas que no tienen nada que ver... sobre todo a esa persona que tanto me apoya y ayuda, aun cuando no lo merezca... mi madre.


"Son mis errores...
 son mis fracasos...
 son estos miedos que yo llevo en mi interior...
 es el sentirme menos o más que otros...
 es no aceptarme así como soy...
 esos momentos que me he sentido solo...
 son esas cosas que nunca tuve y las que perdí".


Hemos entrado al último mes de este año y siento que las cosas no están terminando como empezaron. Perdí la fe y esto fue una excusa para olvidarme de mí mismo... quiero decir: mis ideales, proyectos y sueños. Me dejé arrastrar por la corriente... sin llegar nunca a puerto seguro. Herido, me encuentro herido... resentido con la vida... con todos... y conmigo mismo.

Frustrado, me siento frustrado... por no haber sabido pensar antes... por no haber estado seguro de lo que quería. Por no haber alcanzado el sueño (arriba) mencionado. Pero nunca es tarde para comenzar de nuevo... al menos eso ahora me digo. Durante mucho tiempo me sentí viejo al pensar en hacer cosas que quería hacer... pero hoy veo lo equivocado que estaba.

Mas aún me falta vencer ciertos obstáculos para alcanzar dichos sueños... sueños (que no estoy mencionando) que a muchos les parecerá ridículos (sobre todo a mi padre)... pero son míos. Tengo que vencer ciertos complejos para atreverme a hacer lo que quiero realmente hacer... ser más perseverante para luchar por lograrlos... y priorizar las cosas para alcanzarlos.

Me he aislado de mis amigos... no porque he querido, sino las circunstancias y estado de ánimo, así pusieron... espero volver a contactarlos. Siento que me he vuelto un poco más frío... no sé si será bueno o malo, pero siento que estoy más frío...