domingo, 2 de septiembre de 2012

El camino de la soledad!


Despierto y me veo caminando por una calle vacía en una noche oscura... tan oscura que nada se ve... tan silenciosa que se puede escuchar el caer de un alfiler... tan larga que parece que no hay fin... tan extraña que da miedo estar allí. Parece que no hubiera nadie a mi alrededor... yo solo camino y camino sin saber realmente a donde voy... camino y camino sin más no poder... a un lugar donde realmente no sé.

De pronto empiezo a escuchar algo... son pisadas, son pasos... son personas también caminando... parecen estar cerca de mí, pero no los logro ver... la luz es muy ténue y  hay neblina por doquier. Ellos caminan, al igual que yo, sin poder parar... sin saber a donde van... simplemente caminan por esa calle que a simple vista pareciera vacía... pero que en realidad está llena de gente... de muchísima gente.

"¿Por qué estoy aquí?" me preguntó... "¿Por qué estoy caminando?... ¿Por qué no paro?... siento mis pies, pero no me obedecen... quiero parar, pero camino aún más". Noto que deternerme no es una opción... que tengo que seguir caminando por ese lugar... oyendo pisadas a mi alrededor... pero sin saber realmente dónde están. "Deseo siquiera poder ver... saber dónde estoy... saber a donde voy" me sigo diciendo.

Reviso mis bolsillos para ver qué encuentro... y pese a no poder ver realmente, siento que tengo algo que me puede ayudar. Es largo, termina en punta... lo huelo "es cera" me digo... "es una vela, no me cabe duda. Espera, hay otro objeto, es rectángulo y pequeño... ¿será una cajetilla de fósforo?"... la abró y sí, sí lo es... pero me doy con la ingrata sorpresa que sólo hay un fósforo en dicha cajetilla.

"Tengo solo una oportunidad para prender esa vela... pero hace mucho frío y el viento está soplando... ¿y si no logro hacerlo?"... sé que tengo que intentarlo, pero me da miedo tratar... ¿Qué me pasa? ¡Estoy temblando! ¿Por qué? Solo debo hacerlo con mucho cuidado... sigo caminando, no me puedo detener... pero eso no parará mis deseos de saber. Raspo el fósforo con la cerilla con mucho cuidado... ¡Prendió! Bien, ahora con mucho cuidado debo prender la vela... será mejor no respirar, será mejor con mucho cuidado intentar...

Y en la desnudez de la luz, yo pude ver... a más de mil personas caminando también... todos van en una sola dirección... con la cabeza agachada, caminan como robots. La gente conversaba sin hablar... la gente oía sin escuchar... nadie se ha dado cuenta que acabo de prender una vela en medio de tanta oscuridad... nadie se ha dado cuenta de su luz... todos tienen la mirada medio ida... como que no saben tampoco por qué están acá... están confundidos como lo estaba yo.

Entonces algo empieza a suceder, siento que mis piernas al fin me empiezan a obedecer... pero tengo miedo de que al parar, los que están atrás mío me vayan a chocar... mas debo intentarlo, así que paro. Me detuve en medio de la calle... los que iban detrás simplemente me bordearon y siguieron su andar... no se detuvieron ni alzaron la mirada... noté sus expresiones, era de preocupación... era gente preocupada, temerosa, confundida la que caminaba por esa calle que parecía vacía.

Empecé a caminar, entonces, para un costado... las personas me bordeaban, pero no se detenían para nada... la luz de la vela no los cegaba... es más, podría asegurar que en realidad ni la notaban. Llego entonces a las paredes de esa calle... empiezo a caminar siguiendo la ruta de los demás, pero apoyado sobre esa pared. Y en un momento dado, llego a una esquina... había otra calle que la cruzaba, pero esa calle sí estaba deshabitada... toda la gente sólo caminaba por la calle que conocía sin voltear a ningún otro lugar... veo, entonces, que en esa esquina hay un letrero... me acerco a él y me quedo absorto al notar... que el nombre de la calle era "soledad"!


 "The sound of silence"




La gente camina muchas veces sin saber...
que otros, como ellos, están allí también!

6 comentarios:

  1. WOW! Debo admitir que me he quedado boquiabierto... Vaya que esta vez haz hecho una reflexión maravillosa, a veces por no saber que hacer... seguimos por ese camino a obscuras sin poder ver y darnos cuenta que a nuestro alrededor hay muchas otras personas que están como nosotros, buscando... perdidos en la soledad...

    Esperaré ansiosa mente tu nueva entrada

    Saludos! :D

    ResponderEliminar
  2. Sólo es cuestión de tender/extender la mano.

    ResponderEliminar
  3. oh soledad, eterna compañera, hasta cuando?...

    me encanta tanto esa canción que la tengo en muchas versiones diferentes-

    salu2

    ResponderEliminar
  4. Es curioso justo hoy en la mañana estaba pensando algo similar. Pero al leer tu texto comprendí lo que no había visto, y es que la soledad está marcada por la no respuesta. Si los caminantes puedieran dar una respuesta al por qué es imposible detenerse, y esa respuesta fuera verosímil sin duda esa comunicación y creencia rompería la soledad. Pero no hay respuesta, así que estamos condenados a estar solos (en plural) por lo que el cartel talvez no debería decir "soledad" y podría decir "vida", daría el mismo resultado.

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Exacto, casi todos (para no decir muchas veces todo) estamos sumergido en nuestra propia soledad... que se manifiesta de una u otra manera. A veces la vida que vivimos es soledad, pero hay que ser valientes para ser uno esa luz que guia el camino.

      Eliminar
    2. ¡Que optimista! jeje igual creo que se necesita un poquito más que valentia. Porque para ser una luz se necesita tener una solución al movimiento,osea poder detenerse. Pero no solo no es sencillo es imposible. El lenguaje que es el único capaz de dar solución es el que en verdad enreda esa realidad. Igual estas son más palabras que conforman ese castillo en el aire que no sirve para nada. Pero bueno, es un tema pesado y tedioso. Espero no haberte importunado.

      Saludos

      Eliminar